Prueba de la Royal-EnfieldClassic 650 2025 Donde lo vintage se une a lo moderno

La opinión de nuestro probador sobre la 2025 Classic 650

El mes de marzo, tradicionalmente dedicado al esquí, dio un giro inesperado cuando recibí una invitación de Royal Enfield para probar su nuevo modelo 2025, la Classic 650, en Madrid. La idea de volver al sol español para descubrir esta moto me atrajo inmediatamente, a pesar de la caprichosa previsión meteorológica. Nacida en 1901, Enfield no ha dejado de ampliar su gama de motos en los últimos 10 años, así que echemos un vistazo a este último modelo.

Una estética equilibrada

Nada más llegar, la Classic 650 se presentó en una elegante mezcla de negro y cromo. A primera vista, parece fiel a los estándares de la marca, pero una mirada más atenta revela detalles que la diferencian. La pequeña tapa del faro evoca la India aventurera, cuna de Royal Enfield, mientras que las llantas de radios recuerdan a otros modelos icónicos como la Meteor 350, laHimalayan 410 y la Bullet 350. Esta pequeña custom está claramente diseñada para la carretera, lista para engullir kilómetros y recorrer el mundo.

Comodidad, maniobrabilidad y visibilidad

Antes de subirme a la Classic 650, me preguntaba sobre su manejabilidad, especialmente con un peso declarado de 243 kg (probablemente más cerca de los 250 kg a plena carga). Sin embargo, una vez en el sillín, todas mis preocupaciones se disiparon. La posición de conducción es cómoda, con un pequeño asiento que se inclina hacia arriba en la parte trasera, al estilo tractor, ofreciendo un asiento agradable. El manillar está bien colocado, permitiendo una postura relajada sin forzar demasiado los brazos.

La moto está homologada para el carnet A2, y hace honor a su afirmación de ser "fácil de manejar". Mi estatura de 1,70 m y la altura del asiento de 800 mm me permiten poner los dos pies en el suelo sin dificultad, lo que resulta tranquilizador al maniobrar a baja velocidad. A pesar de una longitud total de 2.318 mm, hacer un giro en U no resulta un calvario, a diferencia de otras motos más ligeras, más cortas pero menos equilibradas.

Salimos a la carretera y la visibilidad es buena, aunque mínima, gracias a los clásicos 2 espejos retrovisores redondos de la marca. Acumulamos kilómetros, saliendo de Madrid, evitando las carreteras inundadas para tomar las principales, y rápidamente nos damos cuenta de que falta un parabrisas. En efecto, cuando se viaja a 120 km/h, la velocidad golpea el casco y todo el cuerpo, haciendo que la conducción sea menos confortable. Un efecto perverso del asiento elevado es que cuando intentas moverte ligeramente hacia atrás en el asiento agachándote para reducir la presión del viento, te encuentras rápidamente en el borde del asiento, lo que no es nada cómodo.

Contadores y Trippers

Cuando coges esta moto por primera vez, notas inmediatamente la mezcla de neo-retro y tecnología moderna. El panel de instrumentos está dividido en 2 partes: un velocímetro y otro con información útil.
El velocímetro de aguja es fácil de leer, con una doble indicación (en km/h y millas), que resulta un poco confusa a primera vista, pero al cabo de un rato te das cuenta de que esta moto está realmente diseñada para ir a velocidad de crucero. De hecho, no hay necesidad de calcular conversiones cuando has cruzado el Canal de la Mancha o aterrizado en un país de herencia anglosajona para tu viaje.

La pequeña pantalla digital, situada justo debajo del velocímetro, muestra el nivel de combustible con pequeños cuadrados que se vacían a medida que consumes, proporcionando una información clara y fácil de entender.
También muestra la marcha en la que se encuentra y una pequeña flecha junto a ella, lo que resulta útil para los conductores preocupados por el combustible, ya que indica cuándo es el momento de cambiar a una marcha superior para conducir de forma más frugal. Esto puede ser útil para los conductores que desean adoptar un estilo de conducción más respetuoso con el medio ambiente. Sin embargo, en cuanto se acelera el motor, la flecha desaparece, indicando que se ha salido del modo económico. Un botón situado detrás del comodo izquierdo permite cambiar la información mostrada, indicando el número de kilómetros recorridos desde el último repostaje, el número de kilómetros restantes hasta el próximo repostaje o la hora.

La pantalla del tripper está situada justo debajo de estos 2 contadores, ligeramente a la derecha, y también es perfectamente legible, añadiendo un toque moderno a esta moto con encanto vintage. Este dispositivo te permite conectar tu teléfono a la moto, a través de la Royal Enfiled App-Europe, que te proporciona guía gps durante tu road-trip y te permite compartir tu ruta con tus amigos. Una vez emparejado el teléfono con la moto, sólo tienes que introducir tu destino a través de una dirección o punto GPS, y el tripper te mostrará, paso a paso, la ruta a seguir mostrando flechas en la pantalla de la moto y la distancia a recorrer antes de girar, así como el número de km que te faltan para llegar a tu destino.
Cuando el tripper de la moto no está activado, muestra la hora. Esta mezcla de lo vintage, con el velocímetro de aguja, y lo moderno, con la pantalla digital y el tripper, está perfectamente equilibrada, con cada elemento en su sitio sin resultar desproporcionado o fuera de lugar.

Suspensión, frenado y manejo

Las horquillas telescópicas de 43 mm y la suspensión trasera doble SHOWA son una verdadera ventaja, ya que absorben las irregularidades de la carretera con agradable facilidad. Los badenes se eliminan, haciendo que cada trayecto sea tan suave como una nube.
A pesar de la lluvia constante, pude apreciar la suavidad de la conducción. La Classic 650 es tolerante y agradable de conducir, y su motor bicilíndrico en paralelo, muy redondo y sin embrague, ofrece suficiente potencia (47 CV) para circular sin esfuerzo. Esta moto está claramente diseñada para ir de crucero. Su naturaleza suave te anima a tomarte tu tiempo en la carretera; está hecha para disfrutar del campo y saborear cada momento sobre dos ruedas. Las 6 marchas cambian con facilidad y el selector está bien situado, accesible sin tener que adelantar el pie. Con este tiempo tan caprichoso, es difícil oír el rugido del motor al cambiar de marcha, pero los 648 cm3 del Classic no parecen demasiado ruidosos, marcando unos tímidos 86 db.

Sin embargo, hubo un detalle que me sorprendió: el freno trasero, compuesto por un único disco de 300 mm con pinza de doble pistón, es especialmente mordaz, lo que me provocó algún que otro susto, sobre todo en carreteras mojadas. Cuando lo utilicé para deceleraciones suaves y prudentes, la respuesta de frenado fue mucho más brusca de lo esperado. Esto no es un gran problema cuando lo conoces, pero rápidamente me di cuenta de que había que usarlo con cuidado, especialmente en mojado. Por eso preferí utilizar el freno delantero, que es menos brusco y, paradójicamente, en superficies mojadas parecía más suave y tranquilizador. La horquilla delantera absorbía bien las imperfecciones de la carretera y los baches, por lo que no se hundía cada vez que frenaba.

Ficha técnica

Este modelo, presentado en el EICMA 2024, ya está disponible en los concesionarios en tres colores: rojo/crudo (Vallam red), verde cerceta y negro/cromo. El depósito de la Vallam Red está adornado con una fuente "hecha a mano", que la diferencia de los otros 2 colores disponibles.
Las luces LED, excepto en los intermitentes, añaden un toque moderno al diseño. El faro principal está rodeado por 2 pequeñas luces nocturnas, también conocidas como "ojos de tigre", que le confieren un estilo inconfundible y fácilmente reconocible.

Además, con la compra se incluye un portaequipajes para el pasajero, lo que supone una gran ventaja para aquellos que quieran viajar con dos personas. Debajo del comodo izquierdo hay una toma USB de tipo C, que permite cargar un dispositivo adicional, como el teléfono, cuando se utiliza el tripper.

En conclusión, probar la Royal Enfield Classic 650 fue una experiencia enriquecedora. Esta moto consigue combinar la estética vintage con la tecnología moderna, al tiempo que ofrece una conducción muy cómoda. Ya sea para conductores noveles o motoristas experimentados, la Classic 650 es una opción atractiva para aquellos que buscan explorar las carreteras con estilo y serenidad. Si buscas una moto que encarne el espíritu de la "Ruta 66" sin dejar de ser accesible, no busques más: la Classic 650 bien podría ser tu próxima compañera de ruta.